¿Existen las conspiraciones?
Pensamiento y Razón
Hace poco escribí una
nota que titulaba: “La verdad nos hará libres” En
este mundo… No siempre.
Continuando con el tema de la verdad que se nos otorga y niega como sociedad,
escribí las siguientes líneas.
La
reunión de dos o más personas es una “conspiración” para alguien que no
participa de ella; el tenor, objetivo o virulencia de esa asociación dependerá
del grado de compromiso e intencionalidad de los/las allí reunidos/as.
Verdades negadas, mentiras
atesoradas como hechos ciertos, desinformación tendenciosa, ocultamiento
planificado de aquellas verdades molestas o incómodas, es la base de las
conspiraciones más destacadas, que el truculento siglo XX nos ha regalado.
Sí,
la desinformación está en manos del “Poder” que controla los hilos de quienes
gobiernan o administran, este enmarañado sistema; esta frase, en sí misma,
parece ser una declaración conspirativa.
Permitidme fabricar y controlar el dinero de una nación y ya
no me importará quién la gobierne.
Mayer Amschel Rothschild. |
La
llamada Realeza del mundo, por tradición, historia comprobada y demostrada intentó por todos los medios mantener o preservar su particular “Estilo de
Vida” que final mente llevó a la Revolución Francesa.
La
opresión, el totalitarismo o el absolutismo que intenta mantener modos de vida
para muy pocos, en desmedro de la mayoría de la sociedad, llevo a la reacción
popular y a las grandes revoluciones.
Las
pudientes familias ricas del mundo tanto Occidental como Oriental entre las que
se encuentran viejos y modernos apellidos cargados de dinero y tradición que de
ninguna manera dejaran sus “Estilos de vida y privilegios” sin
dar pelea.
Ellos,
quienes se consideran a sí mismos, “Dueños del mundo”, no dejarán en
manos de sus gerentes, administradores, los políticos, el destino de sus bienes.
Tienen
el poder suficiente como para desestabilizar un país, ejercer el poder
requerido en los asuntos internos para tomar el control y llevar al país o la
región hacia el lineamiento de sus intereses.
Utilizan
todo tipo de resortes y estratagemas dispuestas en organizaciones de los “Estados Dominantes” o hegemónicos del
Orbe, manipulando organizaciones públicas o privadas, que acomodan a su antojo
e intereses.
Este poder, está
motorizado por la fuerza más poderosa que poseen, el dinero; compran
conciencias, voluntades, dominan a la perfección, la ambición, la corrupción,
allí donde sea necesario.
Así se proveen de
una gran cantidad de entidades y agentes involucrados; operaciones que a veces
resultan expuestas, por algún error operacional o una acción indebidamente
controlada que se les escapó de cálculo, “Perdidas colaterales” con poca o nula
repercusión.
Esto ocurrió
cuando por pura casualidad fue fotografiado por científicos Norteamericanos
quienes los denunciaron a los medios de información en la selva oriental de
Bolivia El coronel Oliver North, quién regentaba varias “Cocinas” de “Blanca” (Laboratorios
de producción de cocaína) para financiar a los “Contra”.
Los insurgentes mercenarios
actuando, fuera de la mirada del pueblo norteamericano, para lo cual el
patriótico Coronel North a las ordenes del Congreso de los EEUU. Fraguó una
operación triangulada de venta de armas con IRÁN.
Esta operación
clandestina, como se demostró posteriormente, autorizado, por El departamento
de Estado Norteamericano sería destinada a pagar la fuerza desestabilizadora
contra la Revolución Nicaragüense, injerencia directa en la determinación del
pueblo de Nicaragua.
La
“Desinformación” que los medios corporativos entregan licuada y diluida de tal manera que se adecue
a sus intereses y el de las Naciones, muchas veces involucradas, o las
maleables declaraciones de la ONU.
Una de las
familias líderes en este esquema de poder es la familia Roschild o como se la
conoce “La casa Roschil” de origen
judío-Alemán, nombre que surgió de la existencia, en la primer casa en Frankfurt,
Alemania conocida por ostentar en su fachada un escudo o “Blasón” rojo que los
identificaba. (Escudo con la expresión gráfica del nombre)
Esta familia con
raíces muy profundas en el judaísmo europeo se dice que fueron los financistas
o banqueros de emprendimientos de monarcas de los países europeos; a su vez a través de acciones especulativas ejercieron
un gran poder sobre la Francia napoleónica.
Algunos aseguran
que la casa fue fundada por un judío-Alemán, Amschel Mayer, que tomo el nombre del blasón que se mostraba
en el frente de la casa donde vivía, como ya expliqué.
Otros aseguran
que fueron los Roschil de Francia, (En sus orígenes fueron parte de las huestes
esquenazi de Europa) quienes en el siglo XV otorgaron a los REYES DE
Castilla y Aragón, por medio del Duque de Medina, que actuó de intermediario,
el dinero requerido para la campaña Colombina.
Existe infinidad
de material que se inscribe en este tema de las “conspiraciones”; que no son
otra cosa que el accionar de los integrantes de la cúpula de la pirámide para
acallar las voces disonantes en este concierto de dominación encubierto.
La información
sobre estos poderes públicos que se conocen públicamente y por su extenso poder
actúa en forma encubierta y tan alejada de nuestro hacer cotidiano, que sus
acciones y negociados pasan desapercibidas, hasta que hacen explosión en
nuestras vidas.
Este accionar,
que nos parece tan extraño, lejano, inaccesible, fantasioso y poco creíble, tal
como nos lo presentan los medios de estos grupos de poder, es ajeno a la base
de la pirámide poblacional; nosotros la famosa y manejable “Opinión
Pública”, “Las Masas”, la sociedad de “Gobernados”
que sólo pretendemos “Vivir”.
El problema
comienza cuando los Gobernantes se exceden y los gobernados no quieren ser
“Controlados como marionetas” comienzan a cuestionarse y cuestionar el “Orden”
constituido de las cosas y su participación en ellas.
En particular su
rol en el mundo, su mundo, sociedad, su familia y el papel que juega en esto; el
abismo, que se abre ante sus ojos y bajo sus pies, es tan inmenso e
incomprensible, en relación con las enseñanzas inculcadas desde la niñez, que
el primer instinto es rechazarlas por descabelladas, acción que se espera
ocurra.
La curiosidad es
una malsana consejera, la base de la
pirámide está siendo educada convenientemente para actuar de acuerdo a los
objetivos de los grupos dominantes, y esto es lo que hace, y para lo que está,
debidamente educado y aleccionado, el ciudadano promedio.
Los Roschild
europeos, a través de sus bancos se convierten en socios de los Rockefeller,
los Morgan financiando y participando de la formación y consolidación de Los
Estados de Norte América, como una Nación.
En el
Renacimiento se consolidó, en las llamadas Ciudades Estado (Florencia, Venecia,
Milán, Génova, Nápoles, grupos de personas, familias poderosas de esas ciudades
que controlaban todo; Los Borgia, Medici, Colona, Sforza, fueron algunos de los
apellidos más renombrados que quedaron en el registro histórico por su gran
importancia y protagonismo.
Los famosos
Medicci, a quienes se los llama “Padrinos del Renacimiento” fueron no sólo
impulsores de las artes y las letras sino grandes comerciantes, hábiles banqueros
de una visión extraordinaria.
Así que no es de
extrañar el surgimiento de familias adineradas que supieron aprovechar la
oportunidad, circunstancias políticas y sociales para convertirse en los
controladores del mundo.
Si a estas
asociaciones, lícitas o ilícitas, las encuadramos en la temática conspirativa,
no puedo negar su existencia hasta nuestros días; Davos; Mildberg; FMI. BID.
Grupos y más grupos que se reúnen a espaldas de los pueblos a decidir nuestro
destino.
Entonces
deberíamos aceptar que la razón fundamental de las conspiraciones es el
ocultamiento o negación de la verdad a la “Opinión pública”.
El ocultamiento
de la verdad los hace dueños de ella, otorgándoles ese poder absolutista y
desmedido que, los sabedores de esto,
extienden a todo el quehacer social, situación que alimenta el descontento y
genera rebeliones; motivo por el cual aumenta los niveles de ocultamiento,
desinformación y acciones delictivas de las cuales se nutre la “Ficción”.