Ni
tan tan Ni muy muy…
Que
ADEPA condenara las acciones que, la justicia lleva adelante en la causa contra
Vicente Massot, no nos dice nada nuevo, ya que la institución corporativista
sólo representa a los medios que realmente tienen poder económico y político en
la sociedad, no a los medios “independientes”.
Por
Ruben A. Spaggiari para Diario21, Foto Prensa Sudamericana y la Web.
Vicente Massot es
integrante de una familia muy conocida y arraigada a la región, director dueño
del multimedios del sur que tubo o tiene además de radios, canales de
televisión, el diario más importante e influyente del sur argentino.
Recordemos
que la ubicación geográfica de Bahía Blanca como, portal de la Patagonia es
real y la fuerza y penetración que ha tenido como órgano de la prensa escrita
en su área de influencia es sólo compartida por el diario Rio Negro, de la
familia Rajneri en Gral. Roca, Río Negro. La Nueva Provincia, es un medio
grafico formador indiscutible de opinión.
Vicente
Massot es acusado de delitos de lesa humanidad, por asociación ilícita con
militares, muchos de ellos, del Vº Cuerpo de Ejército, con asiento en Bahía
Blanca y la Marina, con asiento en la Base Naval Puerto Belgrano, en
proximidades de la localidad, durante los años del Golpe Cívico-Militar.
Golpe de
Estado que sus ejecutores llamaron Eufemísticamente: “Proceso de Reorganización
Nacional”, charada que mató, torturó y asesino, impunemente, valiéndose del
poder absoluto de un “Estado de facto” que se encargó de hacer que casi todos
los argentinos nos creyéramos “Derechos y humanos” cuando ignorantes o no de lo
que sucedía miráramos para otro lado mientras se cometían atrocidades.
Esta
defensa que hoy realiza la entidad que aglutina a los medios gráficos poderosos
del territorio nacional, ADEPA, a los ojos de quienes estamos en el que hacer
gráfico y periodístico no nos engaña.
A los
ojos desprevenidos puede parecer la defensa de un medio pero no es así, y no lo
beneficia en nada a Massot ya que esta entidad representó y representa los
intereses empresarios de la prensa escrita con poder en su directorio, de lo
contrario ningún medio periodístico existe.
Que
explique ADEPA que medio gráfico pequeño, de la ciudad de Buenos Aires o del
interior del país, tiene voz y voto en el seno de su directorio.
Medios
que son recibidos en la entidad como “Adherentes” mientras tengan su cuota al
día, cuota que holgadamente pueden pagar los grandes convirtiéndose en el
primer escollo para permanecer.
Siendo
periodista en algún momento de la trayectoria uno quiere ser o debe ser su
propio editor y crea su medio propio, impresión de terceros, escribiendo,
diagramando, armando, hasta el cansancio, pero intentando aquello en lo que uno
está; en ese momento al pasar de ser un periodista en cualquier rol a ser dueño
de un medio, (Me causa pena decirlo así) UTBA sindicato al que perteneciste como
trabajador de prensa, te quita de su padrón, por ser dueño.
Dueño de
un sueño … Pero eso no importa en el sistema.
ADEPA te
inscribe e incorpora si, después de reiteradas presentaciones, te aceptan y
pagas la inscripción y cuota correspondiente, mes a mes, para el sólo hecho de
pertenecer a un ámbito donde no se tiene cabida desde la posición de pequeño
medio del interior.
Presentación Diario21 en Mar del Plata 1997 |
No se
puede comprometer a un amigo a participar en un sueño y crear falsas
expectativas, se le debe pagar su trabajo, lo sé porque fui colaborador en
varias editoriales antes de querer crear algo de la nada.
Fue en
ese entonces cuando fui parte activo de la institución, con un solo objetivo en
mente, ver de qué manera lograr una sumatoria de la cuota de poder del mandato
de medios pequeños del interior.
No pude
lograrlo, las necesidades me agobiaron y terminaron ahogándome.
ADEPA
está defendiendo una corporación, no a Massot, si a lo que éste representa, eso
lo sabemos, la sociedad argentina ya despertó del letargo de los años negros y
no se traga sapos tan grandes.
La
realidad es que la defensa de esta entidad no es otra cosa que alinearse junto
los que ejercen el poder y tienen, cierta cuota de él, frente a la sociedad
inerme que, cuando los detecta clama Justicia.